Hoy la ruta no fue terrestre. Visitamos el castillo de Sancti-Petri que se encuentra situado en un islote, frente a la desembocadura de un caño del mismo nombre.
Embarcamos en el muelle de Gallineras (San Fernando,Cádiz) y realizamos una pequeña travesía hasta el islote.
Muelle de Gallineras (S. Fernando). Al fondo, la Ermita de los Santos en un enclave de gran valor arqueológico.Auxi, miembro excursionista, no se separó ni un momento del chaleco salvavidas.
En la otra orilla, Chiclana con la Ermita de Santa Ana.
Orilla derecha, donde discurre la ruta que lleva a la Punta del Boquerón .
En la orilla izquierda, hasta hace unos pocos años, había un poblado almadrabero. Actualmente hay un club náutico. En proyecto está en recuperar el pueblo con fines turísticos.
La confluencia del final del caño con la mar abierta, produce una ola de considerable tamaño (enorme para los que no estamos acostumbrados a estos lances marineros) que produjo cierto "acongojamiento" en el personal. Fuera de este pequeño trance la travesía fue perfecta. En poco tiempo apareció a nuestra vista el islote, los muros del castillo y su torre atalaya, que hace las veces de faro.
Punta del Boquerón
Es una fortificación de carácter defensivo y trazado irregular, situado en aguas del Atlántico y perteneciente al municipio de San Fernando (Cádiz).Tiene la consideración de FUERTE (abaluartado, costero, fusilero).
Formaba parte, en la época en que era usado, de la línea de fortificaciones que protegían la entrada del caño de Sancti Petri, brazo de mar que desemboca frente al islote, junto a las baterías defensivas de la punta del Boquerón (la batería de Urrutia, la batería de San Genís y la batería de Aspiroz), formando un conjunto de importancia estratégica y militar para la zona.
En época fenicia ya existía un templo de origen fenicio, conocido como Templo de Hércules Gaditano. En esta época el islote no existía, pues se situaba en la isla principal del archipiélago gaditano, la isla de Kotinoussa, que se extendía hasta la actual Cádiz.
La dificultad que supone el agua en una isla, hizo que en la construcción del castillo se tuviera en cuenta todo tipo canalizaciones que recogieran el agua de lluvia.
Aljibe
Detalles de las canalizaciones
El agua se desviaba a los aljibes por esta canalización.
Pomponio Mela afirmaba que bajo el templo estaban enterrados los restos de este personaje mitológico. Otras fuentes clásicas relatan la visita de personajes famosos como Aníbal o Julio César.
Estrabón, en el s.I a.C., en su Geografía, refiere que los tirios fundaron “Gadeira” y alzaron el santuario en la parte oriental de la isla y la ciudad en la parte occidental.
Según Estrabón, en las columnas de la entrada, probablemente de bronce, los navegantes hacían sus sacrificios. Abundaban en el santuario los altares de bronce con el fuego sagrado o mostrando escenas de la vida de Hércules. Además de los restos de este dios tenia reliquias tan famosas como el cinturón de Teucro, héroe griego hijo de Telamon, y el árbol de Pigmalión cuyos frutos decían que eran esmeraldas, lo cual se puede relacionar con los dragos que existen en Cádiz de varios siglos de antigüedad.
Muy famosos fueron los dos pozos de agua dulce que tenían un régimen de crecidas inverso al de las mareas.
Desde principios del siglo pasado, han aparecido numerosos restos arqueológicos que muestran la importancia que tuvo este santuario en la antigüedad, que alcanzó su máximo esplendor en tiempos de Trajano.
Durante el dominio visigodo perdió toda su grandeza. Distintas ocupaciones a través del tiempo, la explotación de la piedra ostionera, la acción del mar, ataques y destrucciones han hecho desparecer prácticamente el santuario.
La torre-atalaya, que en la actualidad podemos contemplar, es la construcción más antigua del conjunto, ya que data del primer cuarto del siglo XVII.
El resto de la construcción, las murallas y el interior del recinto, datan del siglo XVIII.
Desde este islote la vista se extiende,por la costa, desde Cádiz hasta Cabo Roche
Cádiz
Acantilados de la Playa de la Barrosa
Chiclana
Medina Sidonia
Cabo Roche
Último vistazo al castillo en nuestra vuelta al muelle de Gallineras
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