Con tanta salida botánica, teníamos abandonadas nuestras aventurillas en busca de lugares con restos arqueológicos. Esta vez ha tocado visitar unos dólmenes situados en el entorno de Ronda.
Dólmenes de la Edad del Cobre
Cortijo El Chopo
Un curioso pozo adosado a la roca
San Cristóbal, Torreón, Monte Prieto, Cerro Coros,...
La parte superior del dolmen, asoma sobre las copas de los jóvenes olivos.
El sepulcro megalítico de la Giganta se encuentra situado en los terrenos del Cortijo El Chopo.
Consiste en un sepulcro de galería de planta trapezoidal y cerrado al exterior por dos ortostatos colocados a la entrada; sus laterales son rectilíneos convergentes hacia la entrada, abriéndose hacia la cabecera.
El lateral derecho consta de 9 ortostatos (sólo se conservan completos el 1º y el 6º), y el izquierdo de 8. La cabecera es rectilínea, formada por 2 ortostatos colocados oblícuamente a las paredes del sepulcro.
Datos del Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico
Las dimensiones del dolmen son: anchura máxima 2'3 m. (cabecera); anchura mínima 1 m. (entrada); longitud total 9'3 m.; altura máxima 2'4 m. (cabecera) y altura mínima 1'1 m. (entrada).
El piso sobre el que se asienta el sepulcro es de material calizo, elevándose escasamente desde la cabecera hacia la entrada. El material de los ortostatos es arenisca calcárea miocena de la zona.
Cerro Malaver
El empedrado en perfecto estado
Sobre la meseta del fondo se encuentra el fenomenal yacimiento arqueológico de Acinipo (Ronda la Vieja).
Volvemos a la carretera que se dirige a Ronda. Nos dirigimos en busca del otro dolmen situado en este cerro de superficie aplanada, en su parte alta. Rocas que, según el amigo Amarillo son del mismo tipo de las que conforman el famoso Tajo de Ronda.
Una gigantesca alcachofera destaca en el verde sembrado
En poco tiempo, llegamos a la Venta La Vega situada en el cruce que lleva a Montejaque.
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Dejamos el coche en la venta y nos dirigimos hacia un caserío. Se encuentra situado al pie de la rocosa meseta. Hay que bordearla en dirección a una torreta
Una amable vecina nos indicó el camino.
Ladridos y balidos nos acompañaron, en el corto trayecto que nos llevó hasta el dolmen.
Ni que decirlo hay, los paisajes, espectaculares.
El amigo Juan se dirige presto a la encina, donde bajo su sombra, aparece el Dolmen de Buendía.
Dolmen de Buendía
Desde este lugar disfrutamos de una fantástica panorámica de la Sierra de Grazalema.
Juntas aparecieron, estas dos bellezonas.
Veronica polti y Veronica cymbalaria
Moricandia moricandioides subsp. baetica
Finalmente, decidimos acercarnos a El Gastor. Aquí se encuentra la Tumba del Gigante
La ruta se inicia, al final del pueblo, por una empinada pista de cemento.
El camino se bifurca. Deberíamos seguir por la derecha hasta un cartel indicativo del Dolmen del Charcón. Pero decidimos volver. El tiempo se echa encima.
Tumba del Gigante
Para matar el gusanillo recupero unas imágenes de hace 8 años. Lo curioso es que somos los mismos andarines.
Volveremos para obtener mejores imágenes.
¡ Hasta la próxima !
Bonito paseo dolménico.Estupendas fotos y muy detalladas las explicaciones. Gracias por compartirla, espero poder hacerla próximamente. Un saludo.
ResponderEliminarMe falta por conocer el de Buendía. Gracias Paco por la referencia a mi blog. Estupendas fotos.
ResponderEliminarDe La Gigante se conoce también como El Chopo, y Del gigante como El Charcon.
ResponderEliminarBonita e interesante entrada Paco.
ResponderEliminarGood back ground and just come from Chopo!!
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