"En el fondedero de Umm Hakín se encuentra la ciudad de Algeciras. Está situada sobre una colina que domina el mar, sus murallas siguen exactamente la ribera. Al Este de la ciudad se encuentra un barranco; al oeste, jardines de higueras y arroyos de agua dulce. La ciudadela se inclina sobre el barranco y constituye una fortaleza muy sólida; sus muros son de piedra, se levanta al Este de la ciudad propiamente dicha y le es contigua. Hay una mezquita mayor de hermosa construcción: comprende cinco naves, y está provista de un amplio patio y de una galería en su lado Norte; esta mezquita se encuentra en el centro de la ciudad, en la cima de una colina..."
Al-Himyarí: Kitäb al Rawd al-mi´tär...
Me dirigí al hotel Reina Cristina. En sus jardines se encuentran las ruinas de la mezquita.
Hotel Reina Cristina
Sir Alexander Henderson , responsable de las obras del ferrocarril, mandó construir dos hoteles gemelos, uno en Ronda y otro en Algeciras junto a la última estación que él se encargó de construir. El encargo fue llevado por un arquitecto inglés de confianza de Sr. Henderson y tiene un claro carácter inglés pero con pinceladas hispánicas.
Fue el marco de la llamada Conferencia de Algeciras. De enero a abril de 1906 se hospedaron en el hotel los representantes de España, Francia, Alemania, Estados Unidos, Gran Bretaña, Italia, Rusia y Marruecos, que trataron la división de este último país en zonas de protectorado entre España y Francia.
RUINAS DE LA MEZQUITA ALJAMA
Según las descripciones de cronistas islámicos, estaba constituida por cinco naves, un patio, galería cubierta en la fachada norte y alminar.
Fue mandada edificar por Abdarrahman I en el último cuarto del s. VIII
En el año 859 los normandos arrasaron la ciudad y quemaron la mezquita mayor, aunque los algecireños lograron expulsar a los invasores y apoderarse de uno de sus drakkars, con cuya madera labraron las vigas y las puertas de la nueva mezquita.
En el año 1344, una vez rendida la ciudad a los castellanos, fue consagrada como catedral, entronizándose en su altar mayor la imagen de Santa María de la Palma que traía Alfonso XI consigo.
En 1396 volvió a ser centro del culto islámico, hasta la destrucción de la ciudad en el año 1379.
Los árboles del jardín casi no dejan ver "el bosque" (las ruínas)
Por lo menos, aquí están cuidadas y alejadas de los nuevos vándalos.
A duras penas pude fotografiar el pozo (está cubierto por una rejilla metálica)
En los jardines tuve la suerte de toparme con dos ejemplares de la mariposa monarca (Danaus plexippus)
Este insecto, además de su gran belleza, se caracteriza por su resistencia (son capaces de recorrer más de 100 kms. por día) y longevidad, pues mientras otras especies de mariposas tienen un ciclo vital de 24 días, la monarca llega a vivir hasta nueve meses, es decir, 12 veces más. También es conocida por sus increibles periplos de cerca de 4.000 kms.
MURALLAS ANDALUSÍES
Se hallan situadas en el Paseo de la Conferencia, en la llamada Huerta del Carmen, a pocos metros del Hotel Reina Cristina.
Las torres era macizas hasta la altura del adarve, no sobresaliendo por encima de la muralla.
En el siglo X, el historiador al-Rasi se refirió a Algeciras diciendo que "el muro de la ciudad cuelga sobre el mar"
Lo que emerge de la tierra son dos torres de flanqueo y dos tramos de la barbacana o segunda cerca. Otras tres torres, la muralla, el resto de la barbacana y el foso se conservan soterradas.
Este importante yacimiento abarca una extensión de 4000 metros cuadrados. Las murallas de la medina algecireña fueron edificadas en el s. IX durante el reinado del emir de Córdoba Muhammad I, después de que los normandos hubieran arrasado la ciudad en el 859.
La muralla era de tapial y las torres de flanqueo de calicanto revestido de mampostería por hiladas. Las esquinas de las torres están reforzadas con cadenas de sillares.
Cuando los almorávides desembarcaron en Algeciras en 1086 construyeron la barbacana o segunda cerca y el foso que rodeaba la medina por la parte oeste y sur. Más tarde, en el s. XII, los almohades reforzaron el ángulo sureste de la muralla edificando junto a la playa una torre albarrana que la Crónica de Alfonso XI denomina Torre del Espolón.
Vestigios de la torre albarrana han pervivido hasta finales del siglo XIX en la playa del Chorruelo. Su función principal consistía en defender la zona sur de la ciudad. Impedía ala entrada de invasores a través de la playa.
Torre del Espolón
De la muralla que defendía la ciudad por su flanco oriental, edificada sobre el borde del acantilado, se conservaron varios tramos hasta mediados del siglo XX
Donde hoy se halla situada la embocadura de la calle "Ojo del Muelle", en el paseo marítimo, se conservó hasta los años cuarenta del siglo XX un tramo de la muralla de al-Binya que contenía un gran arco apuntado que fue en época islámica, la Puerta de las Atarazanas (astilleros)
Detalle de las atarazanas en la maqueta del Museo Municipal
Las flechas indican la situación de las corachas marítimas.
Erodiun (geraniaceae)
Después de un pequeño paréntesis botánico me dirigí, como final de la jornada, a la Plaza Alta, ya que, en una anterior entrada sobre Algeciras, Simón (facebook) me indicó que para la construcción de la iglesia de Nuestra Señora de la Palma se reutilizaron los sillares de las viejas murallas medievales, estos sillares, visibles en la torre conservan marcas de cantero similares a las aparecidas en varios yacimientos de la ciudad.
Esta iglesia ocupa el sitio de la antigua Mezquita Mayor.
Por hoy, punto y final
Contemplar estas vistas es un buen sabor de navidad... gracias.
ResponderEliminarPasa la vida y seguimos inseguros
Caminamos erguidos con prisas por volver
los caminos de hierro se adentran en los campos
el fuego de la chimenea nos delata su humo
que los seres humanos hoy ni eso pueden hacer
El miedo a lo desconocido nos paraliza el alma
Rujen las estrellas paciendo en los prados
Mientras las viñas son como abejas
No cambian sus costumbres… son como los humanos.
Molina
Un saludo
Antonio