Halimium halimifolium subsp. halimifolium

Las Yeguas, Puerto Real, Cádiz

Pulicaria paludosa

S. Fernando, Cádiz

 

Daucus carota

 

Malva hispanica

San Fernando, Cádiz

Cistus libanotis

Las Yeguas , Puerto Real, Cádiz

Euphorbia boetica

Las Yeguas, Puerto Real, Cádiz

La calzada romana del Puerto del Pico

Esta vez nuestra intención era pasear por una calzada romana. Hemos partido de El Barco de Ávila en dirección al Puerto del Pico.

Mañana bastante fría pero bellos paisajes

La Calzada Romana del Puerto del Pico es una muestra más de la influencia del Imperio Romano en la provincia de Ávila. Son más de 3 kilómetros de camino empedrado que unen la localidad de Cuevas del Valle con la cima del Puerto del Pico.

 

Su principal función era la de comunicar el sur de la Península Ibérica con el Sistema Central.

Tiene un enorme valor histórico pues ha servido para poner en comunicación, a través de la Sierra y a lo largo del tiempo, a las tierras llanas de la Meseta Norte con las tierras del Valle del Tiétar y a través de éste con las tierras de Toledo y Extremadura.

Día fresquito nos pilló en el puerto. En el pequeño regato se habían formado cristales de hielo.

Su trazado está formado por tramos rectos, de fuerte pendiente, unidos por curvas muy cerradas que hacen ganar altura en poco trecho.

Su firme estaba formado por cuatro capas superpuestas: cimiento, piedras grandes, grava y empedrado.   

Para canalizar los arroyos son frecuentes las alcantarillas.

La superficie es ligeramente abombada para evitar encharcamientos. El desagüe se dirigía por canalillos dispuestos a tal fin de trecho en trecho.

Calzada romana que servía para conectar la fortaleza de Abula con el eje vial Emerita Augusta-Complutum- Caesaragusta a la altura de Caesarobriga, comunicando las dos mesetas.

Valle del Tietar

Ruta estratégica de la trashumancia, tramo importante de la Cañada Occidental Leonesa, por donde han subido y bajado desde la Edad Media y aún suben y bajan los ganados que marchaban desde los extremos a la sierra a comienzos de verano y desde la sierra hasta los extremos a comienzos del invierno.

Además, durante el s XV comenzó a emplearse también como ruta de carretería para el transporte, principalmente, de madera y sal.

Durante el trayecto había que pagar un portazgo a la altura de Ramacastañas en beneficio de la Corona.